En estos tiempos de avances tecnológicos constantes, es tan importante tener una buena página web como que esté adaptada a los dispositivos móviles. Cada día es mayor el consumo de internet desde tabletas o smartphones, por lo que una web que no se vea adecuadamente en estos dispositivos perderá muchas opciones de negocio.
Una vez que tenemos esto claro, algo en lo que coincidimos todos, la pregunta que se nos plantea es: ¿qué tengo que hacer para que mi web sea una web móvil? ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta? Vamos a enumerar algunos de ellos:
– Lo primero es tener un diseño responsive, es decir, que se adapte en función del dispositivo en el que el usuario lo vea, de forma que en todos los casos se vea bien.
– Como las búsquedas a través del móvil son distintas y la conexión muchas veces no es la mejor, es importante no ralentizar la velocidad de carga. Ya sabemos que, como usuarios, no tenemos paciencia, y si una página tarda en cargar nos iremos a otra.
– El tamaño de los dispositivos móviles es más pequeño que el de ordenadores normales, por lo que es más difícil que los usuarios realicen acciones. Es decir, que tenemos que facilitar todo lo posible una navegación sencilla, sin que tengan que dar muchos pasos para llegar a donde quieren.
– Ofrecer a los usuarios la posibilidad de hacer lo que quieren desde nuestra web móvil: por ejemplo, llamar por teléfono. Un ejemplo: si un usuario busca el teléfono de una tienda desde su móvil y le ofrecemos la posibilidad de llamar directamente, tendremos muchas más posibilidades de que lo haga y consigamos una conversión.
– Si tenemos un dominio independiente, debemos realizar su correspondiente sitemap, para que Google lo indexe correctamente.
¿Qué otros aspectos os parecen importantes para adaptar la web al móvil?